jueves, 6 de mayo de 2010

Ojalá tenga la madurez suficiente de dejarte ir... No es que no sienta nada por vos, no es que nunca te quise, no es reencor... es que a veces, no quedan ganas de insistir.
No tengo ganas de volver a perder en este juego que siempre fue hecho a TU medida.
Nunca supe cual fue la salida, nunca vi la llegada...
No sé como empezamos, nunca supe como ibamos a terminar.
Pero creo que la vida es eso, prueba y error.
Probé con vos y creo que perdí, perdimos, perdiste... no se bien como fue, nada mas se que no fue lo que esperé.
Al principio todo es color de rosas
Después, se vuelve un poco mas oscuro y después quedan cenizas de la razón de tus días.
Cuando esas cenizas quedan tarda mucho el verdadero viento que las vuele y las saque por siempre de tu corazón, pero llega... ese viento potente, parecido a un tsunami, que arrasa con todo e intenta no dejar huellas de esa persona... O sí, deja alguna marca, pero casi invisible.
No pretendía ser la razon de tu vida, de TODA tu vida
pero no puedo negarte que alguna vez quise ser algo mucho más de lo que fui.
Estuvimos lejisimos de ser eso que la gente envidia, de tener ese amor arrasador, estuvimos lejos de jugarnos todo por el otro (me incluyo también)... estuve lejos de demostrarte todo lo que sentía, pero sentí que nunca peleaste por mi y eso me freno siempre.
El miedo a tirarme a la pileta, sin agua, sin salvavidas, sin NADA.
Y salí lastimada, pero aprendi que vale la pena jugarsela por un amor, aunque las cosas no terminen tan bien, te hace sentir la persona mas PLENA del mundo y la mas triste cuando termina, per siempre llega otro después, supere o no al anterior, volvés a sonreir y a recordar eso como algo hermoso, que te marcó TAANTO....

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